lunes, 13 de diciembre de 2010

AMARTE ME MATA

El hiriente atentado contra el tiempo,
decide por mí la rutina de cada día,
amordazado yo, miro desde mi asiento,
con el vaivén que tu ruina envía.

Mujer es sinónimo de promesas,
mujer es sinónimo de ilusiones,
pero cuando llegan las remesas,
sólo quedan las intenciones.

No quiero volver a enamorarme,
porque mucho me duele el pecho,
no quiero volver a equivocarme,
porque ya he tocado el techo.

Mi cuerpo se queda barnizado,
mi alma estrellada en el suelo,
con olor a mentira impregnado,
aplastada sin algún consuelo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario